Sal 22:3-4 Pero tú eres
santo, Tú que habitas entre las alabanzas de Israel. En ti esperaron nuestros padres; Esperaron, y tú los
libraste.
Como Dios habita entre las alabanzas ,
rendirle tributo de adoración es la vía para disfrutar plenamente de su
presencia. El concepto aquí es que la alabanza realza la gloria de Dios y
permite a quienes la tributan escuchar la respuesta de su soberano celestial. A
través del Espíritu Santo esta respuesta de lo alto puede adoptar formas
diversas, tales como la manifestación de su poder en medio de su pueblo o la consolación necesaria y oportuna a demás de un llamado al silencio o al
temor reverentes, la convicción de pecado y la salvación de los pecadores. Este
versículo 3 debe servir de orientación y modelo en los momentos de la adoración
colectiva e individual.
La
alabanza : es el camino hacia la presencia de Dios, LA SENDA DE LA ALABANZA. Sin lugar a dudas, aquí se
enseña una de las cosas más excitantes y notables de la alabanza honesta y
sincera: la alabanza traerá la
presencia de Dios. Aunque Dios está
presente dondequiera, hay una manifestación única de su dominio, que se revela
de manera particular en una atmósfera de alabanza. Aquí encontramos el remedio
para los momentos cuando nos sentimos solos, abandonados o deprimidos. ¡Alabar! No importa cuan simple
sea, compón tu canción y testifica de la bondad de Dios en tu vida. El resultado : ¡Dios se
manifestará! Su presencia vivirá (morará) en nuestras vidas. La
palabra «habitar» (del hebreo yawshab significa «sentarse, permanecer,
establecerse, o casarse». Es decir, Dios hace más que manifestarse cuando le
alabamos, su presencia permanece con nosotros y establecemos una relación cada
vez más fuerte con él, tal y como la experimentan dos personas que ejercen el vínculo matrimonial!!!. Permitamos que esta verdad haga crecer nuestra fe y
nuestra confianza, y nos libere de las dudas, el tormento y la esclavitud maligna.
Notemos como el texto utiliza simultáneamente estas tres palabras: «alabar», «esperar» y «liberar».(Sal_18:3/ Sal_47:7) C.G
Cuando alabemos a nuestro Dios hagámoslo como el Salmista. "BIEN". Sal 33:3 "Cantadle cántico nuevo, hacedlo bien tañendo con júbilo".
Cuando alabemos a nuestro Dios hagámoslo como el Salmista. "BIEN". Sal 33:3 "Cantadle cántico nuevo, hacedlo bien tañendo con júbilo".
¿Y tu, cuando fue la ultima vez que dedicaste el tiempo para alabar a nuestro Dios? Que la alabanza a El sea una experiencia cotidiana en nuestras vidas. Amén.
(Haz clic sobre la referencia bíblica para ver el texto)
Comentario N.T. de la Biblia
Plenitud, con leves ajustes de S.A.S.P.
Esta sección tiene como meta, presentar información oportuna,
interesante y hasta curiosa para el conocimiento
sobre la Biblia, la poderosa palabra de Dios.
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