Gen 6:1 Aconteció que cuando comenzaron los hombres a multiplicarse sobre la faz de la tierra, y les nacieron hijas, 2 que viendo los hijos de Dios que las hijas de los hombres eran hermosas, tomaron para sí mujeres, escogiendo entre todas.
Existen varias versiones de cómo se interpreta esta frase en el verso 2 "hijos de Dios", en este espacio nos ocuparemos de resaltar la versión que desde el punto de vista exegético se acerca más a la verdad señalada en este pasaje.
Según el Dr. E. Carballosa en su libro Génesis, la revelación del plan eterno de Dios, p.p. 133-134, tocante a este tema, nos desarrolla los siguientes argumentos:
1. En primer lugar, la designación de "hijos de Dios" en la forma concreta como aparece aquí es siempre una referencia a "ángeles" (veáse Job 1:6, 2:1, 38:7, también Dn 3:25, Sal 29:1, 89:6). La Septuaginta (LXX), la versión griega del antiguo Testamento, concuerda con esa traducción al traducir la frase como joí ángeloi tou theou, es decir "los ángeles de Dios", lo mismo hacen Josefo, en el libro de Enoc y los antiguos escritores judíos y cristianos.
2. En segundo lugar, el Nuevo Testamento corrobora esa interpretación, como lo demuestran los pasajes de Judas 6 y 2Ped 2:4-6. El vocabulario de Judas 6 cuando hace referencia a los ángeles que abandonaron su posición angelical ("su dignidad"), tomando otra, apunta al hecho de que se trata de seres angélicos. También la comparación que se hace de Judas 7 del pecado angélico con la relación sexual contra naturaleza de los sodomitas apoya una referencia a los ángeles. No cabe duda de que Judas tiene en mente el pasaje de Génesis 6. A demás en 2Pedro 2:4-6, Pedro relaciona una caída de los ángeles con los días de Noé, como lo demuestra el contexto. Esa caída fue un acontecimiento concreto de los ángeles, los cuales están reservados en un lugar especial, aguardando el juicio. Pedro usa el vocablo tartarosa , de la raíz tártaro, que es el nombre dado por los griegos al "bajo mundo" especialmente al lugar de los condenados. El cuadro descrito en el pasaje mencionado arriba, es extraño y no debe sorprender que genere dudas ¿No dijo el Señor que en la resurrección ni se casarán ni se darán en casamiento?, sino que serán como los ángeles de Dios en el cielo (Mt 22:30)? Pero el Señor no dijo que no tuviesen sexo, (ni que tuviesen apetitos sexuales como mínimo), y, a demás, habla en este texto de los ángeles <en el cielo>, no de aquellos que ahora pueden estar en el <tartarosas>. Sabemos que los ángeles que posen cuerpo pueden comer (Gen 18:8). Lo mas probable es que en Génesis 6:1-6 sea un caso de posesión demoníaca, es decir, espíritus satánicos que cohabitaron en cuerpos de los seres humanos y estando poseídos por demonios se relacionaron sexualmente. Es posible a demás que el resultado de estas relaciones (raza de gigantes o nefilin) produjese un cambio cromosómico que afectó la estructura genética de aquella generación. En los Evangelios hay ejemplos de personas poseídas por demonios que adquieren una fuerza sobre humana (Mr 5:3-5, Lc 8:29-30).
En resumen, los hijos de Dios y las hijas de los hombres, eran seres humanos poseídos por demonios. En este caso o condición se unieron sexualmente y procrearon una raza violenta y terriblemente pecadora, y aunque siendo de carne, como el texto declara. Esas personas solo pensaban en el mal y Dios los juzgó.
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