La Orotava, Tenerife, España.
Gran Tarajal, Fuerteventura 8 / 2 / 14.
Es evidente el llamado que nos hace el Señor en su palabra a que le sigamos, "si alguno quiere venir en pos de mi, niéguese a si mismo tome su cruz cada día y sígame". Sin embargo muchos en la actualidad pretenden seguirle a su manera, escuchando frases como: Yo sigo la religión de mis padres, siguiendo tradiciones que fácilmente pudieran estar equivocadas. Otros le ponen condiciones a Dios, recordemos el caso de aquel hombre que pidió al Señor que le dejara enterrar a su padre primero y que luego le seguiría. Razones legítimas o no, ninguno de nosotros estamos en capacidad de condicionar al Creador de todo. Otros se atreven a escoger el lugar donde quieren ir a reunirse, poniendo como argumento lo que a ellos les permiten hacer o no ante poniendo sus intereses particulares en primer lugar antes de dar el lugar que corresponde a Dios.
No podemos ponerle condiciones a Dios. ¿Quiénes somos para pretender siquiera pensar eso?
Empecemos definiendo lo que quiere decir la palabra "seguir" en el idioma original griego (kolouthein).
a. Es la palabra usual para describir a los soldados siguiendo a su jefe supremo.
b. Se usa corrientemente respecto al esclavo siguiendo o sirviendo a su amo.
c. Con mucha frecuencia significando el hecho de seguir o aceptar el consejo u opinión de alguien.
d. Era muy común en el sentido de seguir el hilo o argumento de un discurso.
e. En relación a la obediencia a las leyes, seguir las leyes de un país era aceptarla como norma de vida.
f. En los papiros antiguos, kolouthein se usaba con mucha frecuencia significando, pegarse a alguien hasta conseguir algún favor que se desea.
Efectivamente los significados descritos antes se ajustan a la realidad que para todo genuino creyente en Cristo debe representar esta palabra en nuestras vidas. Seguimos a nuestro jefe supremo bajo sus órdenes como buenos soldados, sujetos a su señorío como siervos leales aceptando sus consejos dejados en su bendita palabra.
Es por eso que quisiera compartir con ustedes, tres maneras en las que no debemos seguir al Señor.
1.- No debemos seguirle por intereses egoístas, Juan 6:2, 26 "Y le seguía gran multitud, porque veían las señales que hacía en los enfermos". "Respondió Jesús y les dijo: De cierto, de cierto os digo que me buscáis, no porque habéis visto las señales, sino porque comisteis el pan y os saciasteis".
Habían razones claras por las que el Señor obraba y actuaba sanando y demostrando su poder sobrenatural. En Jn 4:48 leemos. "Entonces Jesús le dijo: Si no viereis señales y prodigios, no creeréis". Esto lo dijo en referencia a Israel, mas a nosotros se nos ha dicho: "Bienaventurados los que no vieron y creyeron" Jn 20:29. Claramente queda demostrado que estas señales eran necesarias para la conversión del pueblo de Dios, recordemos el clamor que Jesús hace sobre Coracín y Bethsaida. Mt 11: 20-23.
2.- No debemos seguir al Señor de lejos, Mateo 26:58 Mas Pedro le seguía de lejos hasta el patio del sumo sacerdote...
A pesar de ser un discípulo sobresaliente, esto no bastó en el día de la prueba para poder resistir la tentación. El Señor previno a Pedro con anterioridad, pero este prefirió apoyarse en su propia prudencia, desestimando el sabio consejo de su Maestro. Nosotros no somos mejores que Pedro, nuestros problemas espirituales se incrementaran en el momento que dejemos de lado las enseñanzas que encontramos en la sagrada palabra de Dios y dejemos de confiar en El y pasemos a confiar en nosotros mismos.
3.- No podemos seguir a Cristo con miedo, Marcos 10.32 ...y ellos se asombraron y le seguían con miedo...
Para la sociedad judía las riquezas eran un regalo de Dios en compensación por nuestra fidelidad a El, de tal manera que el concepto que ellos tenían sobre este tema no concordaba con lo que el maestro acababa de decirles. Los judíos habían aprendido desde pequeños que las riquezas eran dadas por Dios, según leemos en 1 Co 29.12 Las riquezas y la gloria proceden de ti... así como leemos en Deut 28.1-14, donde Dios promete al pueblo de Israel prosperidad material y personal si ellos le obedecen en todo.
De modo que las palabras dichas al joven rico que se había negado seguir al Señor a causa de sus riquezas les había perturbado de tal modo que Marcos describe en tres ocasiones en este capítulo 10 el asombro de ellos, vrs 24, 26, 32. Si esto era asi como el Señor lo decía, entonces quien podría ser salvo si toda la vida ellos habían querido ser bendecidos por Dios de esta forma material.
El Señor les deja clara la respuesta en el versículo 27 ...Para los hombres es imposible, mas para Dios, no; porque todas las cosas son posibles para Dios. Que alentadoras palabra que deberían llenar cualquier vacío que el miedo y el temor quisieran ocupar! No es posible ser salvo anteponiendo las riquezas antes que Dios, pero Dios puede salvar a cualquier rico que pone a Dios antes que sus tesoros.
Es muy importante seguir a Cristo, de hecho los evangelistas mencionan esta palabra en relación con el Señor al menos unas 77 veces, pero no menos importante es reflexionar de que manera le estamos siguiendo. Te has planteado alguna vez de que manera le estas siguiendo? Espero que este sea una buena ocasión para hacerlo.
(Si quieres mas detalle sobre este tema escucha-lo en mp3),
De que manera NO debemos seguir a Cristo .mp3
(haz clic sobre el título para acceder).
De que manera NO debemos seguir a Cristo .mp3
(haz clic sobre el título para acceder).
Si te preguntas: De qué manera debemos seguir a Cristo?
(haz clic sobre el título para acceder).
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