La Orotava 21 de Junio 2014.
Juan 6:16-21.
En este pasaje encontramos una descripción detallada del escenario de la tormenta, luego de la alimentación de los cinco mil, repasemos algunas frases que el escritor sagrado nos deja: vrs. 16 "Y al anochecer"... "descendieron al mar"; vrs. 17 "Y era ya oscuro"..."y Jesús no había venido a ellos"; y no suficiente con todo esto el verso 18 cierra el panorama con un viento fuerte que soplaba. Una descripción perfecta para evitar hacer este viaje, sin embargo Mateo y Marcos nos dicen en el pasaje paralelo a este un detalle que Juan omite, que Jesús hizo entrar a sus discípulos en una barca Mat 14:22 y Mar 6:45. Los discípulos a pesar del panorama que tenían enfrente también tenían la encomienda del Señor de pasar al otro lado, el mismo Señor les "hizo entrar en la barca". Y que tremenda lección nos da este pasaje, no importa que la oscuridad espiritual reine a nuestro alrededor y que tengamos que descender en nuestro camino de peregrinar hacia el mar embravecido y que el viento nos intimide y haga mermar nuestra confianza; Por encima de todo eso, tenemos la encomienda de parte del Señor de pasar al otro lado y aunque todos estos elementos estén en nuestra contra sabremos que llegaremos a puerto seguro porque Dios cumple siempre lo que promete.
Pero a pesar de nuestra confianza y obediencia, estas cosas no nos eximen de estar en medio del turbulento mar de las dificultades ordinarias en nuestra vida. Entonces ¿que hacer para salir de ellas? Juan nos da algunos pasos para ello:
1.- "Pero Él les dijo: Yo soy, no temáis". Juan 6:20, Todas las condiciones climáticas les eran contrarias y sumado a eso los discípulos estaban cansados de remar, habían recorrido una distancia considerable 25 a 30 estadios (5,55 km aprox.), pero había un sentido que tenían aún activo y era el oído, ellos escuchan al Señor decir Yo soy no temáis. Y este es el primer paso que dan para empezar a salir de su situación tormentosa, escuchar la voz del Señor. Cuando nos agobian los problemas, parece que es más fácil oír otras voces que no son la que deberíamos escuchar. Solo la voz del Señor podrá calmar nuestra tormenta, al leer su palabra le escuchamos, al asistir a la iglesia escuchamos su voz hablándonos. Y es por eso que el Señor les tranquiliza con aquellas palabras, ganando sus oídos.
2.- "Ellos entonces con gusto" Juan 6:21. Cuanto disfrutamos del comer cuando tenemos mucha hambre ¿no? pues parece que este era el caso la experiencia de la ausencia del Maestro en medio de una situación urgente y su presencia allí trae un sentimiento de satisfacción notable, "con gusto", para salir de nuestras tormentas debemos recibir las palabras de Dios de buena gana y satisfechos de que solo su presencia nos puede traer paz. Podemos escuchar la voz de Dios hablándonos y al mismo tiempo cuestionarla. Esta no es la actitud, debemos recibirla con gusto sabiendo que es lo mejor para nosotros.
3.- "le recibieron en la barca" Juan 6:21. Muchas veces estamos consientes de que el camino correcto solo lo encontramos escuchando la palabra de Dios con agrado, pero del dicho al hecho hay mucho trecho. Una cosa es saber y otra es hacer, Los discípulos recibieron al Señor en su barca, como señal de entrega y control absoluto de la situación, en muchos casos tomamos un rumbo paralelo y desviado al rumbo que el Señor quiere que tomemos. Recibamos a nuestro capitán Cristo y cedamos el control total y absoluto de nuestra embarcación al Señor y "enseguida llegaremos a nuestro destino" Juan 6:21 "y en seguida la barca llegó a la tierra adonde iban".
¿Quieres tú al igual que los discípulos salir de en medio de las situaciones tormentosas de esta vida? Sigue estos sencillos pasos y llegarás al igual de los discípulos a puerto seguro en compañía del Señor. Que así sea.
Esta sección tiene como meta, presentar información oportuna, interesante
y hasta curiosa para el conocimiento sobre la Biblia, la poderosa palabra de Dios.
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