Gen_19:6
Entonces Lot salió a ellos a la puerta, y cerró la puerta tras sí,
Gen 19:10 Entonces los varones alargaron la mano, y
metieron a Lot en casa con ellos, y cerraron
la puerta.
El apóstol Pedro menciona a Lot describiéndolo
como justo y abrumado con la conducta de los Sodomitas 2ª Ped 2:7, sin embargo hay que recordar que tomó una serie de decisiones erróneas al cambiar su condición de
peregrino en compañía de su tío Abraham, escogiendo la llanura del Jordán Gn 13:10-11. Pero ¿que de malo podría
tener esa decisión? Abraham lo había invitado con el a Canaan, este era el
objetivo que Dios le indicó a su tío; Lot había cambiado su destino inicial por
lo que apelaba a su vista. Y como si esto fuera poco, cambió su condición de
vida de peregrino, de vivir en tiendas por habitar en una cómoda casa en una
ciudad marcada por la corrupción moral y en la mira de los juicios de Dios Gn 19:1-2.. Llegado a este punto
Lot se ve en medio de un juicio al que el y su familia no debían recibir y
gracias a la intervención de su tío ante Dios Gn 18:23 se produce un proceso de
rescate para el y su familia.
Unos ángeles son enviados a la ciudad de Sodoma para
sacar de allí a este justo y a los suyos. Los hombres de Sodoma observan y
codician maliciosamente dando rienda suelta a sus concupiscencias y tratan de
forzar una situación violenta a la puerta de su casa. Lot marca distancia entre
sus atacantes y sus invitados angelicales “cerrando la puerta tras sí”. Aquí
tenemos una lección práctica para nosotros hoy en día. Cuantos dolores de
cabeza nos evitaríamos poniendo distancias entre nosotros y los principios corruptos de esta depravada sociedad. Poner límites entre nosotros y lo que
nos contamina puede marcar la diferencia de nuestra fidelidad a Dios. Así como
Lot tomó esa decisión somos nosotros lo que debemos hacerlo..
Sin embargo vemos como Lot trata de dialogar
con esta turba y es allí cuando los ángeles tienen que intervenir para sacarle
de esta situación Gn 19:10. No
podemos sentarnos a dialogar con el enemigo en medio de una tentación. José no
se sentó a charlar con la mujer de Potifar cuando está le tentaba a acostarse
con ella., Pablo nos exhorta a huid de la fornicación e idolatría en 1ª Co 6:18; 10:14. Al enemigo se le resiste Stg 4:7 ; 1ª Ped 5:9. y de la tentación
se huye.
Debemos aprender a cerrar las puertas que se
nos abren cuando estas nos invitan a ser infieles a nuestros principios e
ideales establecidos por nuestro Dios..
Continúa...
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interesante y hasta curiosa para el conocimiento
sobre la Biblia, la poderosa palabra de Dios.
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